Muy rico, y la porción era enorme (cuando saqué la foto ya había comido una parte). Lo que sí, me pareció más una milanesa napolitana que caprese. El precio es acorde a la porción, puede parecer caro pero creo que vale la pena.
Lo que hay que tener en cuenta es aclarar bien cuando se pide que querés que sea vegano, aunque lo diga en el menú, ya que tuve que cambiar lo que había pedido por eso.
El otro problema es que demoran mucho, tienen varios juegos de mesa, así que yendo con amigos no se hace tan dura la espera.